Trabajar con la Orden San Juan de Dios ha sido una constante en nuestro devenir como estudio de diseño, y nos ha permitido dotar, a cada uno de los espacios de su sede mundial, de una identidad interior única, basada en sus valores como conjunto. En ese contexto, el salón de actos ha experimentado un acondicionamiento basado en cuatro vectores; la acústica, en el que se ha buscado la absorción de reverberaciones a través de moquetas y fieltros, la iluminación, con alta reproducción cromática y luminarias semiocultas para evitar reflejos, y una paleta de color neutra, sin distracciones, que permitan centrar la atención en el ponente. Como colofón, hemos dotado el espacio de sistemas audiovisuales de última generación, ocultos a la vista del público, pero presentes para su cometido.



















