El proyecto del Colegio de la Imagen Pública se desarrolla en un terreno de 1000 m2 con un frente de 23 m, en el que la extensión y la altura permisible resultaron en una solución vertical de 8 niveles, 2.5 sótanos y un roof garden, en conjunto con jardines y espejos de agua. La estructura, la fachada, y los espacios están integrados en uno solo por medio de una estructura aparente.
Los niveles de estacionamiento se solucionaron por medio de una estructura de concreto, que cuenta con iluminación y ventilación natural. El volumen vertical del nivel 5 hacia arriba contiene los espacios del colegio con estructura metálica. A partir de este nivel se propuso resolver las interconexiones por medio de dos grandes escalinatas que crean un edifico saludable que promueve el movimiento.
Se revisaron los últimos materiales para una escuela de tipo universitaria y postgrados, con los sistemas de amueblado más novedosos y que van de acuerdo con la docencia y formas de enseñar de esta escuela, única en el mundo. Se cuidó que las personas con capacidades diferentes no tuvieran problema para ingresar y pudieran vivir los diferentes espacios de manera apropiada, con las respectivas normas de evacuación para todos los usuarios. El edifico está correctamente diseñado en temas de sustentabilidad, como aprovechamiento del agua de lluvia, válvulas de volumen variable, iluminación LED y la preparación de una azotea fotovoltaica.
De esta manera los usuarios de la escuela se benefician por contar con espacios bien diseñados, contemporáneos, con iluminación y ventilación que proporciona las condiciones ideales para estudiar, aumentando la productividad y disminuyendo el ausentismo.
Por medio de este proyecto se promueve una ciudad de usos mixtos donde se cumple con diferentes necesidades de trabajo, estudio, comercio y entretenimiento en un área compacta en la que se puede caminar y es accesible por medio de bicicletas y transporte público.