Para el proyecto de interiores de este departamento de dos niveles localizado en el poniente de la Ciudad de México se generaron agradables atmósferas utilizando materiales cálidos, que además de enfatizar la atemporalidad del proyecto, logra interesantes contrastes tanto en color como en texturas.
En el área pública destaca un muro recubierto en fachaleta de pizarra negra que contrasta con el piso de duela de madera natural al aceite y el mobiliario que se seleccionó también en la misma gama. Los textiles en diversos tonos de gris combinan y destacan en el ambiente complementando la paleta de color en tonos neutros que se utilizó en todos los muros.
En el segundo nivel se proyectó y construyó un espacio de convivencia social con jacuzzi y zona de asador en el que se disfrutan maravillosas vistas panorámicas de la ciudad y se conecta con la terraza privada. Para las recamaras se utilizó un color vibrante para los muros predominantes en contraste con los pisos.